Abrir una cuenta bancaria en Francia es un seguro para el Gobierno de que sus intenciones son serias. En realidad, tener una cuenta en un banco francés es una condición obligatoria para su estancia en el país. Si no tiene una, no podrá obtener una tarjeta SIM, un abono de transporte o muchas otras necesidades que facilitan su vida en Francia.
Pero el proceso para abrir una cuenta puede ser un verdadero desafío. Debe acudir al banco, explicar claramente su situación a la persona que le atienda, presentar una larga lista de documentos necesarios y, por último, elegir la tarifa que mejor se adapte a sus necesidades. Se ve con frecuencia que los extranjeros eligen tarifas con servicios innecesarios que, a continuación, tienen que pagar regularmente. Por otra parte, no todos los bancos franceses están dispuestos a trabajar con clientes extranjeros, especialmente con estudiantes, o simplemente no tienen la experiencia necesaria para estos casos.
Otra característica interesante de los bancos franceses son los talonarios de cheques. Si pensaba que eso se quedó en siglo pasado, estaba muy equivocado. Los franceses están muy orgullosos de su sistema bancario y lo consideran uno de los más cómodos del mundo. Tal vez solo sea una cuestión de acostumbrarse y entender sus peculiaridades: puede que un día llegue a pensar lo mismo.
Abrir una cuenta bancaria lleva bastante tiempo y aunque es mejor hacerlo en cuanto llegue al país, ya debe tener ciertos documentos que confirmen que tiene un lugar de residencia permanente.
Quartier Latin le ayudará a hacer frente a todas las dificultades que supone abrir una cuenta bancaria y recoger todos los documentos. Valoramos el tiempo de nuestros clientes y hacemos todo lo posible para resolver los problemas lo más rápido posible.
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